Nos permite ver las cuerdas vocales y diagnosticar problemas de la deglución
Una laringoscopia es un procedimiento que en ORL FACE utilizamos para observar la laringe, las cuerdas vocales y las estructuras adyacentes, así como la parte posterior de la garganta.
En una laringoscopia directa, podemos utilizar diferentes tipos de laringoscopios, unos instrumentos largos y delgados que tienen una luz y un lente o una pequeña cámara de video en un extremo. El laringoscopio se introduce a través de la nariz o de la boca hasta la garganta. Algunos laringoscopios son flexibles (de fibra óptica), mientras que otros son rígidos (duros). El tipo que se elige depende de lo que se quiere hacer.
Este examen es indoloro incluso en los niños y no precisa ninguna forma de anestesia local. Con el paciente sentado, se introduce la óptica en las fosas nasales o en la boca, lo que nos permite ver con exactitud las estructuras de la faringe y laringe, por lo tanto, nuestros diagnósticos son específicos y confiables.
En ORL FACE preparamos al paciente para que la introducción del endoscopio se desarrolle sin gestos bruscos, a fin de no tocar las estructuras sensibles de la faringe y laringe. El laringoscopio permite obtener documentos fotográficos para la realización de bancos de datos comparativos y terapéuticos.
La laringoscopia con endoscopios, también permite una primera intervención terapéutica en la consulta, de tal manera que, en algunos procedimientos muy específicos no se requiere ir a quirófano.
Los endoscopios de ORL FACE son desinfectados después de cada examen, respetando las etapas y los tiempos recomendados.
¡Contáctanos porque Oír, Respirar y Hablar bien, Es posible!