Este examen es indoloro incluso en los niños y no precisa ninguna forma de anestesia local.
Este examen se lo realiza con un endoscopio de 4 mm de diámetro, 0º de ángulo y 110 mm de largos, en pacientes pediátricos se lo hace con un endoscopio de 2,7 mm de diámetro y 0º de ángulo. El endoscopio funciona con una fuente de luz fría de 150 w conectada a un cable de luz.
Este examen es indoloro incluso en los niños y no precisa ninguna forma de anestesia local. Con el paciente sentado o acostado, y tras sumergir el extremo de la lente en un líquido antivaho, se introduce la óptica en el conducto auditivo externo lo que nos permite ver con exactitud las estructuras del oído y, por lo tanto, nuestros diagnósticos son específicos y confiables.
En ORL FACE preparamos al paciente para que la introducción del endoscopio se desarrolle sin gestos bruscos, a fin de no tocar las paredes del conducto auditivo externo e incluso la membrana timpánica. El endoscopio permite obtener documentos fotográficos para la realización de bancos de datos comparativos y terapéuticos.
La otoscopia con endoscopios, también permite una primera intervención terapéutica en la consulta a través de la aspiración del conducto auditivo externo lo que nos permite ver en detalle las estructuras del oído.
Los endoscopios de ORL FACE son desinfectados después de cada examen, respetando las etapas y los tiempos recomendados.
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